DESCUBRIENDO A.....FERNANDO GARCÍA PAÑEDA!!!

Pronto publicaré mi reseña sobre el libro "Gentes del Club" (21 enero) que formará parte de la lectura conjunta organizada por Libros que voy leyendo, así que no podía dejar pasar la oportunidad de conocer mejor a su autor, Fernando García Pañeda.

Fernando García Pañeda (Bilbao 1964). Escritor y funcionario técnico.

Colaborador del semanario Shalom de Estambul. En el suplemento cultural “El Amanecer”, ha publicado diversos artículos sobre historia y cultura en idioma judeo-español. En la reivista Trama y Textura publicó el relato: Robo de libros: El crimen no compensa. Colaborador en el colectivo Literatura y Realidad, miembro del jurado del premio “Relatos de Mujer”, del Ayuntamiento de Santurce. Miembro asociado de “Cedro” y miembro de la Asociación de Escritores de Euskadi.

Sus novelas publicadas son:

DATOS DE INTERÉS:

• Twitter del autor
• Página del libro "Gentes del Club"
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ENTREVISTA A FERNANDO GARCÍA PAÑEDA PARA LO QUE LEO Y PUNTO

1.- ¿Cómo empieza uno a escribir? ¿Cómo es ese primer momento?

Lo cierto es que no lo recuerdo. No recuerdo un primer momento concreto. Escribo desde que tengo uso de razón, es decir, desde que aprendí a leer. Supongo que por eso de que los niños repiten lo que ven... y como sólo he dejado de ser niño en escasa medida, lo sigo haciendo. La decisión de escribir algo con intención de compartirlo en general, de publicarlo, me vino muy tarde, cuando el leer y leer centenares de libros no me era suficiente, cuando decidí ampliar la isla en la que me sentía y compartir las letras no sólo con quienes las habían escrito antes, sino también con quienes quisieran leer las mías.

2.- ¿A qué tipo de lector van dirigido sus libros? ¿Por qué?

Supongo que a quienes deseen explorar mundos distintos al que diariamente nos rodea, a quienes deseen pasar un rato de felicidad fuera del mundo que llamamos “real” pasando páginas de forma sencilla, viviendo otras vidas de forma natural... Dicho de otro modo, a quienes compartan la máxima de que no hay disgusto lo suficientemente fuerte que resista una hora de agradable lectura.

3.- ¿Cómo es su hábito para ponerse a escribir? Por ejemplo: se prepara un café y a empezar, simplemente se sienta, etc.

Mi ideal de hábito para escribir sería levantarme muy temprano por la mañana y, después de un primer café, sentarme con mis bártulos con otra taza enorme y no parar hasta que las palabras dejen de salir con fluidez. Pero la realidad es que escribo dónde y como puedo: a veces hasta en el metro, o en ratos sueltos, rodeado de gente o en solitario, en mis cuadernos o en servilletas de bar, haciendo los deberes con mis piratillas o a solas de madrugada...

4.- ¿Qué hace cuando se queda en blanco y nada sale de su pluma(es una frase hecha, ahora más bien se diría de su pc)?

Todavía no conozco esa sensación. Mi desgracia no es la hoja en blanco, sino la falta de tiempo para llenar tantas y tantas páginas en blanco que tengo en tantos proyectos por dar salida a través de mis lapiceros; porque no escribo ni con pluma ni con teclado, sino con lápiz y en cuadernos o libretas de papel. Reminiscencias del siglo pasado...

5.- ¿Quién es su mejor critic@ (alguien que siempre es el/la primer@ en leer sus historias: amig@, pareja…)? 

No sé si es mi mejor crítica, pero mi esposa sí es la primera y la más dura. De hecho, cuando me enfrento a opiniones y críticas una vez publicado un libro, es muy difícil que encuentre alguna más dura que esa primera prueba de fuego.

6.- ¿Cómo sabe cuando ha terminado de escribir un libro? ¿Lo repasa y sabe que está listo o, ya publicado sigue pensando que podrías cambiar algo?

Como decía Borges (supongo que es en lo único a lo que llego a parecerme a él), publico para dejar de corregir. Si por mí fuera, estaría toda la vida escribiendo y corrigiendo un único libro, porque nunca termino de estar satisfecho. Sí sé cuándo terminan las historias que quiero contar, porque no hago sino seguir su hilo y son ellas quienes me llevan, pero me importa mucho el estilo, la forma de escribirlas, de contarlas. La forma es acaso lo único que podemos aportar de nuevo quienes escribimos en este siglo, después de que ya todo está dicho y contado.

7.- ¿Cree que se puede vivir como escritor en nuestro país?

No. Rotundamente, no. De hecho, hay muy poquitas personas que viven en nuestro país como escritores, muchas menos de las que pueda parecer. Cuestión distinta es que completen sus ingresos a través de conferencias, cursos, artículos o similares.

8.- ¿Cuál es, para usted, su mejor libro? ¿Por qué?

Creo que lo mejor que he escrito y publicado es mi anterior novela, “Tres Gymnopedias”. Me propuse el reto introducirme en la piel y la mente de tres hermanas que se enfrentan a momentos decisivos en sus vidas, cada una según su forma de ser y con una escritura concisa, sencilla e impresionista. Y no lo hice del todo mal, a decir de lectores cualificados e imparciales que la analizaron.

9.- Para finalizar esta parte de la entrevista, que tres palabras le definirían como escritor.

Según me han dicho en algunas ocasiones: tenaz, erudito y honesto (aunque tengo la terrible sospecha de que puedan ser variantes sutiles de cansino, pedante y simple).

Ahora me gustaría realizar unas preguntas al lector que, supongo, lleva dentro: 

10.- ¿Cuál es el último libro que ha comprado?

“Westwood”, de Stella Gibbons.

11.- ¿Cuál es su mejor momento para leer?

Cualquiera, siempre que haya al menos algunos minutos por delante

12.- ¿Que le pide a un buen libro?

Integridad y felicidad. Que respete el pacto implícito con los lectores y que me haga pasar ratos de felicidad entre sus páginas.

13.- ¿Cuál es su libro favorito?

No podría decirlo. Y si me pidieran una lista de mis cien libros favoritos, me resultaría muy difícil dejarla sólo en cien.

14.- ¿Qué libro nunca leería?

Me ocurre al contrario. Es muy difícil decir categóricamente «este libro no leeré». Por citar alguno concreto, nunca leería cosas del tipo “Mein kampf” o aberraciones por el estilo. Y en las listas de más vendidos también podría encontrar ese tipo de material.

15.- ¿Qué libro tiene en su estantería desde hace mil y nunca encuentra tiempo para leer?

Hace tiempo abandoné esa práctica tan nociva para el espíritu, y en mis estanterías sólo aparecen libros que he leído o releído. Los miles de libros que no he leído y no leeré no aparecerán ante mi vista más que en librerías o bibliotecas ajenas.

16.-  ¿Cuál es el libro con el que más ha llorado? ¿Y con el que más ha reído?

Más que llorar, ha habido libros que me han dejado con una amargura terrible. Lo cierto es que soy de lágrima difícil (algo de lo que no estoy orgulloso), y no tengo un recuerdo muy claro de cual es la más triste. Aunque las últimas con las que casi se me escapa alguna lagrimilla, fueron “La elegancia del erizo” y “84, Charing Cross Road”. Me gusta mucho más reírme, qué duda cabe, y los últimos con que más recuerdo haberlo hecho son: “¡Pues vaya!”, una recopilación de los mejores escritos de P. G. Wodehouse, y “Tres hombres en una barca”, de Jerome K. Jerome, especialmente el pasaje en el que un padre de familia intenta la sencilla tarea de colgar un cuadro en una pared de la casa.

Ya sólo me queda agradecer a Fernando  que me haya regalado el poder disfrutar de su libro "Gentes del Club"y por supuesto el haberme dejado conocerlo un poco más.

Mil gracias!!!!!